Si hay sabiduría que refleja siempre la vida, son los refranes populares. Y cuando se dice "A perro flaco, todo son pulgas", tiene razón y sino mirar la última noticia que leo del Valencia C.F. donde un jugador fue detenido por incidentes en una discoteca cuando celebraban el cumpleaños de Miguel, y este no fue detenido en cambio porque la debio armar al no desalojar el local hasta que no viniera su abogado, estos "p...." ricos parece que las leyes no van consigo. Menos mal que no soy seguidor de este equipo, ni socio, ni accionista sino retiraba mi único valor para no darselo a ciertos mercenarios y caprichosos de la vida que dan una imagen muy informal siendo unos modelos de conducta totalmente deleznables. Pero los jugadores, en vez de verse más unidos y más involucrados con los problemas del club, cada uno tira por su lado, dejando ver toda la falta de unión dejando solos como siempre a la afición que es la única que nunca rehuye de estas situaciones.
Pobre Koeman, sinceramente desde mi visión, lo han metido ahí y en vez de apoyarlo incondicionalmente, lo estan poniendo como cabeza de turco, cuando los verdaderos culpables de todo esto siempre son los mercenarios de los jugadores, porque por muy mal entrenador que seas, una plantilla es la que te quita o te da. Y como jugador, si te pones el "mono" de futbol y dejas tus problemas al lado con todo lo que te rodea, se consiguen resultados y si el rival es muy superior, entonces es porque el rival es mejor pero la imagen de un equipo la dan los jugadores...
A no ser que en un equipo haya gente muy defensiva con gente muy ofensiva que entonces hay problemas estructurales y la culpa es de un director técnico, pero como en el Valencia lo que menos falta son buenos jugadores, sabemos donde radica porque cobrar ... cobran.
"El portugués Manuel Fernandes fue detenido y pasó la noche del jueves en el calabozo después de protagonizar varios incidentes en una discoteca de Valencia mientras celebraban el cumpleaños de Miguel, que también se vio involucrado en el incidente aunque no fue detenido. Según explicó Miguel en la ciudad deportiva, los hechos sucedieron cuando una persona les acusó de haberle robado el reloj, lo que provocó que la seguridad del local llamara a la Policía y se llevaran a comisaría a Manuel Fernandes y al hermano del propio Miguel. El lateral derecho explicó que él no fue trasladado a comisaría porque se negó a abandonar el local sin la presencia de su abogado, y que posteriormente se traslado a la comisaría para interceder por su hermano y su compañero aunque sin éxito, por lo que éstos han pasado la noche en las dependencias policiales. Sobre las dos de la tarde, Manuel Fernandes salió en libertad, por lo que las diligencias han sido trasladadas al juzgado de Instrucción número 10 de Valencia, el que estaba de guardia, que se encargará del caso."
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